Editorial: Entrelineas Editores Editores: Carmelo Segura y M.ª Eugenia Glez. Cintas
Diseño de cubierta: Sandra Novés Arias
Ilustración cubierta: María Rey
Maquetación: Helena López Guijarro
ISBN: 978-84-9802-998-7
Depósito Legal: M-23111-2015
Ilustración cubierta: María Rey
Maquetación: Helena López Guijarro
ISBN: 978-84-9802-998-7
Depósito Legal: M-23111-2015
SINOPSIS: Conjunto de historias, narradas -casi siempre- en primera persona y que, salvo algunas excepciones, tienen una común línea argumental: el narrador protagonista es un "perdedor", y aún cuando en algunos casos triunfe sobre la medianía, no deja este triunfo de ser una imagen paranoide de la absurda realidad que está viviendo.
Centradas casi siempre en el tema de la muerte como un destino inevitable, no encontramos en absoluto un tono morboso o desesperado en ellas, sino todo lo contrario, esperanza y positividad como una forma de encarar el día a día, conscientes de que el único modo de vivir es viviendo.
Esta postura, aparentemente negativa, crea la posibilidad de un adentramiento en los más hondos rincones de lo humano, que el autor aprovecha magistralmente y, desde allí, nos muestra pozos en donde se esconde el temblor de la ternura, de la soledad, de la incomprensión y de la entrega desinteresada; todo ello salpimentado por una mirada crítica ante la falsedad de ciertas actitudes del entorno social donde viven (vivimos) sus personajes.
En definitiva, historias cotidianas que adquieren gran valor al trascender y convertirse en la verdad del alma.
ACERCA DEL ESCRITOR:
Enrique Eloy de Nicolás Cabrero nació en Valladolid en 1966 y se crió en la pequeña localidad segoviana de Santiuste de S. Juan Bautista; hasta que, tras obtener plaza como funcionario público y pasar algunos años en Castellón de La Plana y Barcelona, se trasladó a Madrid, donde actualmente tiene su puesto de trabajo.
A mediados de los años noventa cursó estudios de Geografía e Historia por la UNED.
Durante toda su vida no ha dejado de escribir, teniendo en su haber varias colecciones de relatos o cuentos, varias obras teatrales y dos novelas en las que aún está embarcado.
En la actualidad es miembro fundador de la Asociación de Escritores de Alcorcón "Alfareros del Lenguaje" (www.alfareroslenguaje.org), de la localidad madrileña de Alcorcón, colaborando en su revista trimestral "Horizonte de Letras”, en sus tertulias literarias y con diversas publicaciones de la colección “Alcorcón a la Imaginación”, editada por la citada asociación.
También es miembro de la "Red Mundial de Escritores en Español" (REMES).
Realizó colaboraciones en varias publicaciones de la Asociación Editorial “Verbo Azul” y en la revista digital de creación literaria "PALABRAS DIVERSAS" (www.palabrasdiversas.com).
Ignacio León
Hoy les traigo la reseña de esta obra, que me ha sorprendido gratamente, no es un libro de muchas páginas, pero creo que por lo mismo resulta mucho más intenso en su lectura.
Compuesto de relatos, todos presentan características comunes, pero ni por asomo son similares en su contenido; la muerte, la mala suerte, las malas decisiones, son entre otras, la constante en las narraciones de este escritor; quien consigue con una gran maestría llevar a quien lee, a descubrir un fascinante mundo, que irónicamente quizá está siempre frente a nosotros, pero la cotidianidad y el ritmo vertiginoso en el que se vive impide verlo.
Cada relato comienza con una frase, algunas me parecieron excepcionales, debo admitir que muchas las anoté porque me parecieron muy acertadas.
No hay mundos rosas, ni finales felices en el estricto sentido, pero quizá descubrimos a un hombre que viendo a un chico suicidarse, siente que perdió más, que el que perdió la vida. Cuantas veces sentimos algo tan seguro, que no lo cuidamos, ni atendemos, ni valoramos, pero cuando se ha marchado, sentimos la terrible desesperanza de no poder recuperar el tiempo perdido, dar marcha atrás y arreglar los errores cometidos.
Cuando la fe mas inquebrantable es tocada por la cruda realidad, las creencias se tambalean como un andamio mal puesto, que suele derrumbarse al menor toque del viento, con consecuencias terribles. La muerte es un personaje, difícil de aceptar en la vida diaria, suele presentarse de manera inesperada....o quizá se le espera, no lo se, pero siempre ocasiona el mismo efecto, de desagrado y dolor, los humanos no sabemos manejar el tema, por mucho que se escriba sobre el y siempre terminaremos preguntando al viento, la razón, pero jamás escucharemos la respuesta.
La suerte, que sería de nosotros si creyéramos que no existe, tantas cosas se atribuyen a ella, que parece que es el guía espiritual más poderoso del planeta. Esos prejuicios tan arraigados en mucha gente, que van a Dios rogando y con el mazo dando, cuantas de esas caretas de falsa piedad, tendrían que caer si descubrieran lo que tienen en casa,
Como verán, muchas reflexiones salen de este libro, Enrique E. de Nicolas Cabrero, ha conseguido en pocas páginas, plasmar emociones y situaciones que raras veces se tienen en la mente, lo ha conseguido de una manera excepcional, con una narrativa clara, simple y directa,
Todos los relatos me gustaron, pero siempre elijo los que me parecen más significativos, en esta ocasión son: El gramófono de Vivaldi, Manuscrito para la eternidad, Doña Juana la sacristana, La cara y el alma del espejo, Basilio el miserable.
Un excelente libro de relatos cortos, con mucho contenido, seguro que más de alguno los hará reflexionar. Lo recomiendo totalmente.
Bienvenida otra nueva reseña del búho y deteniéndome en la SIPNOSIS me parece fabuloso que también se escriba sobre , la muerte y desenlaces que no son felices y comieron perdices... pues la vida como se dice en algún párrafo que he leído no es rosa y hay que tener los pies en la tierra aunque soñar nos guste a tod@s .. y sobre todo que nos hagan reflexionar del entorno que nos rodea , siempre he creído que los escritores/as deben con sus letras a parte de entretenernos dar a conocer la verdad de la vida y mostrarnos las caras que hay en ellas , sean buenas o malas en este mundo hay que estar preparados para lo dulce y amargo ...buena suerte al autor y como no a ti por traer a personas que nos dejan algo de ellos ..buena noches y un saludo.
ResponderEliminarBuenas noches Campirela_ eres un sol :D mil gracias, hacer copy-paste sin fijarnos mala idea jajaja, a mi me encantan los libros que me hacen reflexionar, que me dejan algún mensaje interesante. Como siempre mi agradecimiento por tomarte la molestia de leer y comentar.
EliminarUn abrazo.
ajjaaja , lo del copypaste o plagio aiinsssssssssss es cierto me has pillado con el carrito de los helados SIPNOSIS esta copiado y pegado pero lo otro noo..lo juro x el capitán trueno y sus secuaces jajajaja ..buen apunte Búho gracias y feliz jornada.
EliminarJajajaja, pues confiaremos en el capitan Trueno y sus secuaces jajajaja mil gracias.
Eliminar:D Feliz noche!
La verdad es gratificante leer que hay escritores que se interesan por la vida real. Y vale tanto como eso, el reseñar este tipo de obras. La identificación del lector con los personajes es más íntima y seguramente tocará más fibras. Me lo apunto para leer. Felicidades Thelma. Felicidades por tu libro, Enrique.
ResponderEliminarMil gracias por leer y comentar Jorge. Tus palabras siempre las agradezco mucho.
EliminarUn abrazo.
Gracias, Jorge, por tus palabras. Un abrazo.
EliminarThelma, cada día me sorprendes más. Has extraído la realidad de unos relatos que conozco muy bien y que jamás habría sido capaz de plasmar con esa maestría. Enrique es un escritor nato, con un largo camino andado y es ahora cuando empieza a mostrarse al público. ¡Suerte caballero!
ResponderEliminar¡Mil gracias, Fernando!
EliminarGracias...
ResponderEliminarThelma, muchas gracias por tus palabras y por esta reseña que me ha emocionado. Estoy contento porque has dado en el clavo, has visto perfectamente En efecto, son historias tristes y cotidianas… Algunas de las personas que ya lo han leído, al igual que tú, me han dicho que si es muy triste, que debía haber incluido algún relato con final feliz… Sí, puede que eso hubiera estado bien. Pero mi intención no era mostrar las maravillas y alegrías de la vida, que tampoco son muchas y todos somos capaces de verlas; mi intención era –como dice J. Traven y tú misma- hacer ver al lector los sinsabores de la vida, hacerle ver que –como tu bien dices- la “vida no es de color de rosa”.
ResponderEliminarMuchas gracias por todo, por tus palabras y por tu amistad… Como siempre, es un placer leerte.
No tienes nada que agradecer Enrique, tu libro es excelente y no tiene nada que ver con que seas mi amigo, jajaja que si no me gusta igual te lo suelto, pero no ha sido el caso, yo no creo que debería haber una historia feliz en los relatos, porque en realidad no existen las historias totalmente felices, siempre hay recovecos, por eso tu libro es más especial.
EliminarA mi no me pareció triste, me pareció real y eso se agradece.
Un abrazo enorme y un honor ser tu amiga.
El honor es mío... Y lo sabes... ;)
EliminarUn abrazo también para ti